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Las venezolanas Dayana Mendoza y Stefanía Fernández triunfaron en 2008 y 2009 respectivamente y Marelisa soñaba con emular su éxito. Pese a su condición de favorita, la joven nacida en Caracas no encontró el favor del jurado, que no vio en ella lo que los últimos dos años sí había visto en sus paisanas.
Así, el fracaso de la candidata de Venezuela es mayúsculo al haber sido una de las favoritas al título desde que fue elegida reina de la belleza en su país. Sus compatriotas la veían desde hacía meses en encaramada al trono luciendo la corona y la banda de Miss Universo 2010 y las votaciones en Internet hacían pensar que Marelisa lo conseguiría.
Lo que en un principio se esperaba como una noche mágica en la vida de Marelisa acabó convirtiéndose poco después en uno de los tragos más amargos que ha vivido la joven de Caracas.
Una decepción mayúscula para la joven Marelisa Gibson y para todo un país que vivió con intensidad primero y tristeza después la gala celebrada en el casino Mandalay Bay de Las Vegas y que pondría al fin nombre y apellidos a la mujer más bella del universo este 2010: Jimena Navarrete, de México.
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