La polémica surgida a raíz del supuesto espionaje involuntario de redes WiFi se está convirtiendo en un serio problema para Google. Tras desvelar que su servicio de mapas a pie de calle Street View recogió datos de multitud de redes por error, las denuncias y reclamaciones no han cesado de producirse por todo el globo.
Los consumidores tienen el derecho y la necesidad de saber qué información recogió Google
Ahora, Estados Unidos tomará cartas en el asunto. El fiscal general de Connecticut será el que lidere una investigación en Estados Unidos para ver si Google quebrantó las leyes al recoger los datos personales de miles de personas. "Los consumidores tienen el derecho y la necesidad de saber qué información personal -lo que podría incluir correos electrónicos, navegación por Internet y contraseñas- puede haber recogido Google, cómo y por qué", dijo el fiscal.
Aunque Google se disculpó de inmediato y prometió enmendar el error, las quejas y reclamaciones no se hicieron esperar. El mes pasado, Austria y Grecia prohibieron de forma cautelar la circulación de los automóviles de Street View por violar la privacidad, mientras que la Autoridad Garante de la Privacidad de Italia ha abierto una investigación sobre el servicio Street View.
En Alemania, el estado federal de Renania- Palatinado ha presentado sendas denuncias penales ante las ocho fiscalías de ese Land contra Google por recabar sistemáticamente y sin autorización datos de las redes inalámbricas en dicha región. Renania-Palatinado es el segundo estado alemán que denuncia a Google por la vía penal después de que el pasado mes de mayo lo hiciera la ciudad-estado de Hamburgo.
En España también se han producido denuncias por violación de la privacidad, una de la Asociación para la Prevención y Estudio de Delitos, Abusos y Negligencias en Informática y Comunicaciones Avanzadas (Apedanica) y otra de Facua ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
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